Vistas:0 Autor:Editor del sitio Hora de publicación: 2025-10-31 Origen:Sitio
En el mundo de la fabricación de plástico, pocos materiales rivalizan con el ABS (acrilonitrilo butadieno estireno) en cuanto a versatilidad, resistencia y rentabilidad. Conocido por su dureza y facilidad de procesamiento, el ABS es uno de los termoplásticos más utilizados en el moldeo por inyección , al servicio de industrias que van desde la automoción hasta la electrónica de consumo.
Esta guía completa explora todo lo que necesita saber sobre el moldeo por inyección de ABS, incluidas sus propiedades, temperatura de moldeo, detalles del proceso y consejos prácticos para lograr los mejores resultados.
El ABS es un polímero termoplástico que se obtiene combinando tres monómeros: acrilonitrilo, butadieno y estireno. Cada componente aporta propiedades específicas:
El acrilonitrilo añade resistencia química y estabilidad al calor.
El butadieno mejora la tenacidad y la resistencia al impacto.
El estireno aporta rigidez, brillo y facilidad de procesamiento.
El resultado es un plástico duradero, liviano, resistente y fácil de moldear para darle formas complejas.

La popularidad del ABS en el moldeo por inyección se debe a su excelente equilibrio entre rendimiento mecánico, apariencia de la superficie y rentabilidad. Se procesa fácilmente en equipos de moldeo estándar, se adhiere bien a revestimientos y pinturas y se puede mezclar o enchapar para obtener varios acabados.
Debido a su equilibrio entre resistencia, estética y asequibilidad, el moldeo por inyección de ABS se utiliza en:
Piezas automotrices (tableros, paneles decorativos, rejillas)
Electrónica de consumo (teclados de ordenador, carcasas de monitores, fundas de teléfonos)
Electrodomésticos (carcasas de aspiradoras, mangos de utensilios de cocina)
Juguetes (los ladrillos LEGO son famosos por estar hechos de ABS)
Accesorios de fontanería y equipo de protección.
El ABS es un polímero amorfo, lo que significa que carece de estructura cristalina. Su composición de tres partes le otorga una combinación de rigidez, resistencia al impacto y resistencia al calor, cualidades que pocos plásticos igualan a su precio.
El polímero se puede modificar ajustando la proporción de sus componentes. Por ejemplo, aumentar el contenido de butadieno mejora la resistencia al impacto, mientras que una mayor cantidad de acrilonitrilo aumenta la resistencia química y la tolerancia a la temperatura.
Propiedad | Valor típico |
Densidad | 1,03–1,07 g/cm³ |
Resistencia a la tracción | 40–50 MPa |
Módulo de flexión | 2000-2400 MPa |
Resistencia al impacto (Izod) | 150–300 J/m |
Temperatura de deflexión del calor | 85–100°C |
Contracción | 0,4–0,8% |
El ABS mantiene la estabilidad dimensional bajo carga y su resistencia al impacto sigue siendo fuerte incluso a bajas temperaturas. También ofrece buenas propiedades de maquinabilidad y galvanoplastia, lo que lo hace adecuado para aplicaciones estéticas.
Propiedad | Abdominales | Policarbonato (PC) | Polipropileno (PP) | Poliestireno (PS) |
Fuerza de impacto | Alto | Muy alto | Medio | Bajo |
Resistencia al calor | Medio | Alto | Medio | Bajo |
Acabado superficial | Excelente | Bien | Justo | Excelente |
Costo | Moderado | Alto | Bajo | Bajo |
Facilidad de moldeo | Fácil | Moderado | Fácil | Fácil |
Conclusión: El ABS ofrece una combinación completa de propiedades a un costo asequible, lo que lo convierte en la mejor opción para los diseñadores que buscan rendimiento sin salirse del presupuesto.

El moldeo por inyección de ABS sigue los mismos pasos básicos que otros termoplásticos:
Preparación del material : los gránulos de ABS se secan para eliminar la humedad (generalmente entre 80 y 85 °C durante 2 a 4 horas) para evitar defectos en la superficie como separaciones o burbujas.
Fusión : el plástico se calienta dentro del barril hasta que alcanza su estado fundido.
Inyección : el ABS fundido se inyecta en la cavidad del molde bajo presión.
Enfriamiento : el material se solidifica a medida que se enfría, tomando la forma del molde.
Eyección : la pieza terminada se expulsa, lista para recortar, ensamblar o terminar la superficie.
Debido a que el ABS tiene una baja contracción y un buen flujo, es ideal para moldes y piezas complejos que requieren precisión dimensional.
El control adecuado de la temperatura es esencial para un moldeado de ABS exitoso. Estas son las pautas de temperatura típicas:
Escenario | Rango de temperatura |
Temperatura del barril/fusión | 210–250°C |
Temperatura del molde | 60–80°C |
Temperatura de la boquilla | 230–250°C |
Temperatura de secado | 80–85°C |
Demasiado bajo: flujo deficiente, líneas de soldadura o llenado incompleto.
Demasiado alto: marcas de quemaduras, decoloración o cadenas de polímeros degradadas.
Rango óptimo: Garantiza un flujo suave, un alto brillo superficial y una fuerte unión entre capas.
La temperatura también afecta la apariencia de la pieza: las temperaturas más altas del molde mejoran el acabado y el brillo de la superficie, pero prolongan el tiempo de enfriamiento.
Seque siempre previamente los pellets de ABS para evitar defectos relacionados con la humedad.
Utilice un controlador de temperatura de circuito cerrado para mantener la consistencia del cilindro y del molde.
Evite caídas repentinas de temperatura que puedan causar deformaciones o marcas de hundimiento.
El ABS se considera uno de los plásticos de ingeniería más fáciles de moldear. Fluye bien en moldes complejos, ofrece una contracción predecible y mantiene la estabilidad dimensional después del enfriamiento. También admite operaciones secundarias como pintar, pegar y enchapar.
A pesar de su versatilidad, las molduras de ABS pueden afrontar:
Marcas de quemaduras por temperatura excesiva de fusión o aire atrapado.
Deformación si el enfriamiento es desigual o el diseño del molde está desequilibrado.
La superficie presenta defectos si los pellets contienen humedad o contaminación.
Estos problemas se pueden evitar mediante un control adecuado de la temperatura, ventilación del molde y un secado constante.
En comparación con los plásticos de alto rendimiento como PEEK o PC, el ABS requiere temperaturas de procesamiento más bajas y menos presión, lo que lo hace más rentable para la fabricación de grandes volúmenes.
PEEK, por ejemplo, exige temperaturas superiores a 350 °C, moldes de acero especializados y un estricto control de enfriamiento, factores que aumentan considerablemente los costos. El ABS, por el contrario, puede funcionar eficientemente en máquinas de moldeo estándar.

La versatilidad del ABS lo convierte en la opción preferida para diversas industrias:
Automoción: molduras interiores, cubiertas de pilares, paneles de instrumentos y rejillas.
Electrónica de consumo: carcasas de portátiles, teclas de teclados, marcos de televisores y controles remotos.
Electrodomésticos: Cuerpos de batidoras, aspiradoras y revestimientos de frigoríficos.
Dispositivos Médicos: Carcasas para dispositivos no implantables y carcasas de equipos.
Construcción: Accesorios para tuberías, cascos protectores y placas de interruptores de pared.
Juguetes: juguetes duraderos y de colores brillantes, como los ladrillos LEGO.
La capacidad del ABS para combinar estética con resistencia mecánica garantiza su demanda continua tanto en los mercados industriales como de consumo.
Seque bien el material:
la humedad es el enemigo del moldeado de ABS. Secar a 80–85°C durante al menos 2–4 horas antes de procesar.
Mantenga la temperatura de fusión adecuada:
mantenga la temperatura de fusión entre 210 y 250 °C para obtener una calidad constante de las piezas.
Optimice la presión de inyección:
lo suficientemente alta como para llenar el molde por completo, pero no tan alta como para provocar destellos.
Garantice una refrigeración uniforme:
la refrigeración desigual puede provocar deformaciones o tensión residual; utilice canales de refrigeración equilibrados.
Diseño para el flujo del molde:
Evite las esquinas afiladas y las transiciones gruesas a delgadas que pueden causar vacilaciones o huecos en el flujo.
Controle la ventilación y el diseño de la compuerta:
la ventilación adecuada reduce el riesgo de marcas de quemaduras y gases atrapados.
Considere el acabado de la superficie:
para acabados brillantes, utilice una temperatura de molde más alta; para acabados mate, se prefieren temperaturas ligeramente más bajas.
Ventajas
Excelente resistencia al impacto y tenacidad
Buen acabado superficial y pintabilidad.
Estabilidad dimensional con baja contracción.
Fácil de mecanizar, montar y reciclar
Funciona bien con revestimientos metálicos y adhesivos.
Rentable para la producción en masa
Limitaciones
Poca resistencia a los rayos UV (puede decolorarse con la luz solar)
Resistencia química limitada a ácidos o disolventes fuertes.
Resistencia al calor relativamente baja en comparación con los plásticos de ingeniería como PC o PA
Puede emitir humos si se sobrecalienta durante el procesamiento.
Para superar las limitaciones de los rayos UV, el ABS a menudo se mezcla con policarbonato (PC) o se recubre con acabados resistentes a los rayos UV para aplicaciones en exteriores.
El moldeo por inyección de ABS sigue siendo uno de los métodos de fabricación de plástico más utilizados y rentables en el mundo. Su combinación de resistencia, dureza y calidad de superficie lo hace adecuado para innumerables aplicaciones, desde interiores de automóviles hasta juguetes y productos electrónicos de consumo.
Para ingenieros y fabricantes, comprender las propiedades del material, los parámetros de procesamiento y las consideraciones de diseño del ABS es clave para producir piezas moldeadas duraderas y de alta calidad.
Con las condiciones de moldeo adecuadas, especialmente en control de temperatura, secado y diseño de moldes, el ABS puede ofrecer resultados excepcionales a escala, lo que lo convierte en la piedra angular del moldeo por inyección moderno.